El Cártel del Golfo silenció a los medios de comunicación locales de la ciudad fronteriza de Matamoros, diciéndoles que el asesinato de uno de sus lugartenientes con más antigüedad desataría consecuencias violentas de hacerse público.
Cientos de personas se reunieron para el funeral y tuvieron una celebración a gran escala. Sin embargo, por órdenes de la organización criminal, la totalidad del evento pasó desapercibida en los medios de comunicación locales.
Las circunstancias que rodearon la tortura y el asesinato siguen sin esclarecerse, pero se sabe que el 6 de octubre, las autoridades estatales de Tamaulipas respondieron a una llamada reportando malos olores provenientes de una Lincoln Navigator 2004 color arena que se había dejado en marcha cerca de un cementerio local en la zona poniente de la ciudad.
Al arribo de las autoridades, encontraron un cuerpo dentro del vehículo. La víctima estaba cubierta de moretones, había sido estrangulada y dejada en el asiento del conductor. Posteriormente, la víctima fue identificada como Gumercindo “El Gume” Pérez Maya, de 45 años de edad, jefe de rango medio, pero con mucha antigüedad dentro del Cártel del Golfo.
Al momento en que las autoridades acudían al cementerio, reporteros locales de Matamoros recibieron una notificación por medio de una aplicación de mensajes para que evitaran el área y para que no reportaran nada acerca del asesinato porque de lo contrario enfrentarían graves consecuencias. El mensaje vino de parte de un reportero de Matamoros que actúa como enlace entre el Cártel del Golfo y los reporteros para decirles lo que pueden o no cubrir.
Tanto secretismo sobre el homicidio el funeral que siguió fue porque El Gume fue asesinado por gente del mismo Cártel del Golfo por una supuesta traición. El funeral del capo fue un evento fastuoso con varios mariachis, bandas, carritos de comida y escolta policiaca.
Una fuente con conocimiento directo de las actividades delictivas en Matamoros reveló que El Gume estaba en un tipo de retiro y se le había advertido que no regresara a Matamoros, instrucciones a las que hizo caso omiso.
Esta advertencia pareciera ser que se dio justo antes de su arresto más reciente, en diciembre del 2023, cuando supuestamente tuvo un desacuerdo con otros lugartenientes por cuestiones monetarias y se vio obligado a huir. Su huida se produjo en un momento en el que las dos facciones dominantes del Cártel del Golfo en Matamoros, los Escorpiones y los Ciclones, estaban teniendo desacuerdos y las tensiones sobre la dirección del liderazgo dentro de la organización iban en aumento.
Dichas tensiones se suman a la ya violenta región fronteriza donde por más de un año, las facciones de Matamoros han venido librando una cruenta guerra territorial con la facción de los Metros de Reynosa y sus aliados. Esta violencia continúa diseminado el terror por toda la región a medida que convoyes de sicarios se enfrentan constantemente a lo largo de brechas.
Conocido por su calma y sensatez, El Gume era querido en Matamoros y Río Bravo, donde había estado a cargo de las operaciones de tráfico humano y de conseguir para el Cártel vehículos todoterreno robados. En julio del 2023, El Gume estuvo involucrado en un escándalo cuando personas dentro del Cártel del Golfo filtraron una grabación de audio en la que él ordenaba a sus subordinados que robaran vehículos para la organización delictiva. En la grabación él declara que tenía presión de sus superiores y que estaba tratando de ser razonable pero que necesitaba que aumentara el número de vehículos o iba a tomar represalias. El audio desató mucha controversia dentro del Cártel y se desbordaron las acusaciones acerca de traidores e informantes colaborando con las autoridades estadounidenses.
Aunque había sido arrestado varias veces en el pasado, El Gume se las había arreglado por medio de sobornos para librarse de consecuencias reales, ya que la mayoría de sus casos simplemente desaparecían o eran desestimados por los tribunales mexicanos.
En los días posteriores a su asesinato, los familiares de Pérez Maya publicaron en redes sociales una breve esquela sobre su fallecimiento con una foto del capo de la droga, siendo este uno de los pocos datos publicados que confirmaron su muerte.
Ildefonso Ortiz es un galardonado periodista de Breitbart Texas. El es un cofundador del proyecto Cartel Chronicles de Breitbart Texas junto con Brando Darby y la dirección ejecutiva de Breitbart. Puedes seguirlo en Twitter y en Facebook. Lo puedes contactar en Iortiz@breitbart.com.
Brandon Darby es el director general y editor en jefe de Breitbart Texas. El es un cofundador del proyecto Cartel Chronicles de Breitbart Texas junto con Ildefonso Ortiz y la dirección ejecutiva de Breitbart. Puedes seguirlo en Twitter y Facebook. Lo puedes contactar en bdarby@breitbart.com.
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